Uno de los blindados más fabricados en el mundo, es el M113, un pequeño vehículo oruga construido a base de aluminio.
Durante la Primera Guerra Mundial la infantería combatió desde las trincheras, de forma prácticamente inmóvil. ¡Cuatro largos años en las trincheras!, eso significaba avances de apenas unos metros y retrocesos en los combates, pero en la vida diaria, significaba un terrible sufrimiento por el fango en que las trincheras se convertían, frío, calor, lluvia, enfermedades, olor a descomposición, ratas... y cuando se producía un ataque, entre las alambradas de espino y las ametralladoras... para qué contar más. Podemos imaginar como era la vida y la muerte de estos soldados, bueno en realidad creo que hoy día, a pesar de todo, no podamos imaginarlo.
Con estos antecedentes, la guerra futura para la infantería debía plantearse de otra forma, por ello en los años treinta los ingleses estudiaron como tener tropas acorazadas con los nuevos blindados que habían aparecido al final de la guerra y que con éxito y no sin dificultades parecían ser la solución contra los crueles alambres de espinos y las mortíferas ametralladoras.
En Alemania ocurría lo mismo, pero sin experiencia en el campo de los blindados, pues los ingleses al final habían inventado los tanques.
En todo caso, con los progresos en la aviación y las posibilidades que ofrecían los vehículos a motor, ya mejorados, todo estaba a punto de dar con un nuevo concepto, la guerra relámpago o Blitzkrieg. Esto no era otra cosa que inventar una infantería acorazada apoyada con aviones que podían ablandar o destruir los focos de resistencia que en tierra impedían un avance y con carros de combate blindados que no se detuviesen ante una ametralladora.
Así pensamos en los Panzer y los Stuka... pero lo que fue de igual importancia aunque no reconocida, es la aparición de un nuevo tipo de vehículos: los semiorugas blindados. Estos eran una mezcla entre camión y tanque, con buena movilidad todo terreno, capacidad de carga, cierta protección y además portaban armas con las que combatir sin bajarse.
Todos los ejércitos los fueron adoptando, como los Somua franceses, los M3 americanos, Sdkfz 250 y 251 alemanes... que fueron los más famosos y casi los más prolíficos de no ser por la gran industria americana que con su producción podía ensombrecer a otras cifras de fabricación.
Estos primeros vehículos de infantería tenían muchas limitaciones, por ejemplo, no solían tener techo, dejando expuesto el compartimento de personal al clima y explosiones... la movilidad no era similar a la de un carro y el blindaje solo protegía frente armas muy ligeras.
Tras la Segunda Guerra Mundial, tanto rusos como americanos intentaron mejorar estos vehículos, que por entonces, se usaban para llegar al campo de batalla y desmontar para combatir, dado su poco blindaje y armas, pero eso significaba volver a la infantería tradicional, solo que sin llegar al frente a pie. De modo que muchos los denominaron taxi al campo de batalla.
Por supuesto que los semiorugas comenzaron a abandonarse para surgir unos transportes blindandos solamente oruga, con más movilidad.
En el vehículo del artículo, el M113, se intentó hacer un transporte blindado pequeño y barato, capaz de seguir a los carros, ser anfibio, aerotransportable... exitoso en todo ello, pero, tampoco se podía combatir desde él. Por otro lado, mejor blindado que los semiorugas precedentes seguía siendo incapaz de resistir el fuego de los carros.
A pesar de todo, su uso se extendió y unas 80.000 unidades fabricadas así lo atestiguan, pero seguía siendo un taxi, eso si, algo blindado.
Hasta la aparición a mediados de los ochenta de los VCI, os presento por ahora el taxi de la infantería:
Hoy día utilizado para otras misiones, como en este caso de los zapadores de la Brigada Guadarrama XII.
También como portador de misiles contracarro.
Y después de 40 años, ya empieza a estar en museos. En este caso de Full, Suiza.
Interior del compartimento de tropas, con el puesto del conductor al fondo y el motor a su izquierda.
Este es la versión de mando, el M577, mismo chasis, pero el compartimento elevado para poder estar de pie dentro de él.
Publicar un comentario
¿Qué te ha parecido este artículo? Ayúdanos a mejorarlo con tus comentarios.